Freddy Martínez
Después de haber acompañado a los chicos de la OTAN para la implantación de la democracia en Libia, a la izquierda atlantista europea le acaban de ofrecer una chamba (empleo), para que repita ese exitoso experimento en Siria con el añadido de anunciar a los cuatro vientos -ahora sí- el derrocamiento del presidente Bashar Al-Asad.
Como buenos muchachos criados en los parques donde de niños se acostumbraron a ver a unos fornidos soldaditos de piel bronceada y corazón usamericano, los ya crecidos atlantistas zurdos de hoy comenzaron a desenrollarle la alfombra roja a la OTAN para que esta organización supramilitar intervenga con sus filantrópicas y desinteresadas acciones en la solución del problema sirio.
Los manifiestos, las firmas y las demostraciones solidarias van de reino en reino y de capital en capital; cada quien pone su ‘partícula de desierto’ para que el mundo sepa que en Siria hay otro dictador que debe ser expulsado: "Desde Marruecos a Bahréin la reivindicación es la misma”, (rebelión.org), titula una proclama de “apoyo al pueblo sirio” cuyo gobierno, asegura el documento, “ha asesinado a millares de manifestantes pacíficos por las fuerzas de seguridad del régimen de Bashar Al-Asad, que no ha dudado en recurrir al bombardeo de ciudades y pueblos. Un número aún más elevado de personas han sido detenidas y sistemáticamente torturadas. Los derechos humanos básicos, desde el derecho a la vida al de expresión, están siendo masivamente violados por las autoridades sirias en un país cerrado a la información independiente”.(1)
Como vemos, no hay lugar para las dudas en este manifiesto firmado con muchos apellidos en español que además no tienen problemas en ofrecerle reverencias a un rey chulo y que, como “izquierdistas”, tampoco tienen problemas en representar a lo Shakespeare a las brujas fatídicas de Macbeth, en el papel de conjurar los caminos a quienes, como en las comiquitas, se proclaman los reyes del universo.
Según el escrito, el sátrapa que gobierna en Damasco tiene poco margen de maniobra y debe entregarse a los designios de la comunidad internacional (o sea a Ban- Ki-moon, al presidente de Francia, a la Casa Blanca y la Corte Penal Internacional) para encaminar a Siria a los cambios políticos respaldados en esa “ola reivindicativa que se extiende por el Magreb y el Machreq” y que el mismo presidente Obama ha visto con ojos de agradecimiento, integrándose él mismo a ese coro de protesta social certificada en la prensa corporativa del mundo como “la primavera árabe”.
Ahora, observando el asunto por el retrovisor del tiempo, estoy mirando de nuevo a esa misma izquierda que hace pocos años amanecía en las puertas de los cuarteles de la OTAN (en resumen Estados Unidos) solicitando una intervención militar contra Serbia con el argumento “de proteger a la población albanokosovar de los planes de exterminio del gobierno de Milosevic”. Hoy leo y releo el comentado manifiesto de la izquierda atlantista europea y casi veo a Milosevic convertido en un sátrapa medioriental y a Kosovo en un país donde crecen muchas plantas de olivo.
Han pasado algunos años de aquellas demostraciones de los herederos de Felipe González voceando consignas de simpatías a la soldadesca norteamericana en “busca de justicia”; hoy más o menos estamos en situaciones parecidas. Con Gaddafi esta izquierda repitió el mortífero pedido interventor solapado de alusiones hipócritas a los derechos humanos del pueblo libio, a diferencia de que esta vez no mostraron pancartas en demanda justiciera en la base NATO, aunque sí lo expresaron desde sus respectivos espacios de poder: medios de comunicación, ONGs, parlamentos, academias, partidos políticos y algunos con su propio nombre.
Nadie pone en duda la capacidad hipercrítica de los zurdos europeos, de permanente actividad en el auditorio público explicando los juegos de la política con didácticas donde combinan fábulas, mitos y cuentos infantiles con un marxismo patentado y amasado a su exclusiva propiedad intelectual.
Aunque a veces hagan esfuerzos por parecerlo, esta izquierda no es tonta. Sus voceros conocen los reales intereses de los movimientos imperiales en todo el planeta; por ello recordamos el caso serbio como ejemplo ilustrativo para situarnos en un contexto de conflictos (los actuales y los de reciente data) donde los objetivos geopolíticos siempre han estado marcados en una lógica de conquista y de recolonización y que esta ilustrísima izquierda intenta esconder con argumentos coincidentes al de los jefes políticos que promueven guerras en el mundo.
Regresando a la declaración “solidaria a favor del pueblo sirio”, la izquierda atlantista señala que es mentira la existencia de un plan conspirativo de las potencias occidentales contra la nación siria, en una línea que delata la naturaleza mercenaria del petitorio, leamos: “…cuando más solidaridad demandan los hombres y las mujeres de Siria y cuando parece más justificado y necesario hacérsela llegar desde Europa y América Latina, sectores de la izquierda internacional, defensores en sus propios países de proyectos emancipatorios con los que nos identificamos y que apoyamos, abonan argumentos justificativos de la dictadura siria, basándose en teorías conspirativas y estereotipos ideológicos que han dejado de ser válidos”.
Como es obvio, la última línea está reservada a las posiciones generadas desde la República Bolivariana y a posiciones de países como Nicaragua, Cuba, Ecuador y Bolivia; en ella los felipistas señalan claramente que no podemos justificar la dictadura que gobierna Siria apoyándonos en “falsas teorías conspirativas” y en “estereotipos ideológicos que han dejado de ser válidos”.
Entendemos la necesidad de trabajo de muchos felipistas en crisis; Siria pues es una buena oportunidad para una izquierda que acumula un interesante currículo condenatorio de dictadores en cuyo desenlace hoy se les debe la liberación de Kosovo, Afganistán, Sudán, Irak y, entre otros, Libia.
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1.- "Desde Marruecos a Bahréin la reivindicación es la misma: un cambio pacífico y radical que instaure una democracia que ampare los derechos sociales y económicos de la mayoría" En rebelion.org .- 4-11-2011 http://www.rebelion.org/noticia.php
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